Patología de tipo psicológico que provoca un comportamiento caracterizado por la impulsividad, la hostilidad y el desarrollo de conductas antisociales.
La sociopatía es catalogada como un trastorno de la personalidad, hoy en día conocido como desorden de la personalidad antisocial.
Los hombres son más propensos a padecer sociopatía que las mujeres.
Como tal, es una enfermedad crónica, de modo que carece de cura. No obstante, la psicoterapia y los medicamentos pueden ayudar a controlarla.
El trastorno de personalidad antisocial (TPA), a veces llamado sociopatía, es una patología psiquiátrica. Las personas que la padecen no pueden adaptarse a las normas sociales, como son las leyes y los derechos individuales. Si bien puede ser detectada a partir de los 18 años de edad, se estima que los síntomas y características vienen desarrollándose desde la adolescencia. Antes de los 15 años debe detectarse una sintomatología similar pero no tan acentuada, se trata del trastorno disocial de la personalidad.
Las personas que padecen este trastorno sufren un mal de índole psiquiátrico, un grave cuadro de personalidad antisocial que les hace rehuir las normas preestablecidas; no saben y no pueden moldearse a ellas. A pesar de que saben que están haciendo un mal, actúan por impulso, cometiendo incluso delitos graves. Es común que se confunda este trastorno con otras patologías parecidas, como podrían ser la conducta criminal, el comportamiento antisocial o la psicopatía. Pero son trastornos, aunque relacionados, de diferentes características, con otros tratamientos y consecuencias.
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Los sociópatas son personas que tienen dificultades en sus relaciones personales, desde el punto de vista emocional, son personas que transmiten una gran distancia en el trato, de hecho, no transmiten empatía.
Ausencia de sentimientos fundamentales como la culpa
Características no se perciben a simple vista puesto que un sociópata puede fingir su verdadera forma de pensar y de sentir. De este modo, a nivel social, se muestra como una persona simpática y agradable, son personas que tienen un alto concepto de sí mismas. Es una persona que está tan enamorada de sí misma que tiene afán de superioridad con el otro.
Al ser personas que tienen un sentimiento de superioridad, suelen tener dificultades para asumir el rol de autoridad. Se sienten incómodas ante la idea de tener que obedecer la orden de un superior. Son personas que tienen relativa facilidad para conseguir aquello que se proponen porque como consecuencia de su actitud, pueden caer en la manipulación y el chantaje emocional como un medio de convicción. En esencia, al vivir en sociedad y tener que establecer relaciones sociales en el trabajo, por ejemplo, el sociópata que tiene dificultades de empatía, también tiene dificultades para seguir las pautas de lo comúnmente establecido, es decir, de las normas sociales.
Existen conductas que pueden ser una señal de alarma de este posible problema: el aislamiento social y la falta de contacto. Evidentemente, todo ser humano necesita momentos de soledad en los que estar a solas con uno mismo. Sin embargo, la búsqueda de soledad se convierte en una alarma cuando se vive con una alta intensidad.
Un sociópata puede ser una persona que transmite una imagen de misterio en tanto que como consecuencia de su aparente timidez no se deja conocer con naturalidad. Personas solitarias que tienen un punto narcisista, es decir, altos niveles de ego. Las relaciones personales se vuelven más una carga y una obligación que un verdadero disfrute personal.
Los sociópatas, son aquellas personas que no muestran empatía por otros ni remordimientos por sus acciones. Catalogada como un trastorno de la personalidad, hoy se llama Desorden de la personalidad antisocial.
¿Cómo son los sociópatas?
Es probable que, si te cruzas con un sociópata, no te des cuenta, ya que normalmente se muestran encantadores y son excelentes mentirosos, sin dejar ver sus pensamientos y emociones. Un sociópata, tiene una alta autoestima y se piensa a sí mismo como alguien grandioso, por encima del resto y no tiene ninguna reserva en pasar por encima de los demás, sin sentir resquemos por sus acciones.
VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 1 de 3: Comprender a un sociópata
VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 1 de 3: Comprender a un sociópata
Los sociópatas saben muy bien obtener lo qué quieren, mintiendo y manipulando. Además, suelen tener comportamientos riesgosos, ser irresponsables e impulsivos. Un sociópata, puede perfectamente transformarse en un criminal, pero sabrá bien cubrir sus acciones.
VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 2 de 3: Comunicarte de manera efectiva
VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 2 de 3: Comunicarte de manera efectiva
Si hace algo malo, el sociópata no lo reconocerá como incorrecto, aunque gracias a su inteligencia no suelen meterse en problemas. Tienen dificultades para aceptar la autoridad y pueden sentirse paranoicos ante la posibilidad de que alguien más esté a cargo.
VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 3 de 3: Protegerte
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VER: Cómo lidiar con un sociópata | Parte 3 de 3: Protegerte
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Los sociópatas nacen, no se hacen. Existen niños sociópatas, que van desarrollando sus características a medida que crecen. Actualmente, la sociopatía es un diagnóstico siquiátrico bajo el nombre Desorden de personalidad antisocial.
Si bien es considerado como un desorden psiquiátrico, no existe cura ni tratamiento para la sociopatía, sólo estar pendientes de sus acciones, evitando el posible daño a los demás.
¿Sociópata o psicópata?
Ambos términos suelen confundirse y, en algunos casos, van de la mano. Los psicópatas, comparten varios rasgos con los sociópatas, pero al tener menor control de impulsos, son mucho más peligrosos.
El psicópata, puede experimentar síntomas de sicosis y perder de cierta manera la conexión con la realidad: son verdaderos predadores en busca de presas, a las que atraen de forma inteligente.
El psicópata, disfruta con el sufrimiento ajeno y hace de la crueldad una forma de vida. A diferencia de otros criminales o asesinos, los psicópatas hacen sufrir a sus victimas y matan como forma de combatir el aburrimiento.
Si bien son inteligentes, el psicópata puede perder el control y, en su búsqueda de placer mediante el sufrimiento de otros, dejar pistas. Sin dudas, la mente de los psicópatas es muy compleja.
Sociópatas famosos
Los sociópatas más famosos son aquellos que combinan su sociopatía con rasgos de sociopatía. Uno de ellos es Charles Manson, que formó una secta y convencía a sus discípulos de matar por él.
El famoso médico nazi Josef Mengel también cae bajo la clasificación de sociópata. No veía mal en lo que hacía, ni sentía remordimiento el causar sufrimiento. Además, era conocido por ser encantador, sin dejar pistas sobre su verdadera personalidad.
La sociopatía no se adquiere, sino que se nace con ella. Una muestra de ello son Robert Thompson y Jon Venables, dos niños ingleses que, a los diez años de edad, secuestraron a un pequeño de dos años y, tras torturarlo durante dos horas, lo asesinaron de forma cruel.
Existen muchos ejemplos más de sociópatas en la historia y, lo más probable es que conozcas o convivas con uno sin darte cuenta, eso hasta que actúa.
¿Sabías que los asesinos seriales suelen ser sociópatas o psicópatas?
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