Las venas de las piernas no pueden bombear la sangre eficientemente de regreso al corazón, causando que la sangre se acumule en las extremidades inferiores.
La insuficiencia venosa crónica es una afección prolongada. Se debe muy comúnmente al mal funcionamiento (incompetencia) de las válvulas en las venas. También puede ocurrir como resultado de un antiguo coágulo de sangre en las piernas.
Nombres alternativos: Insuficiencia venosa crónica; Enfermedad venosa crónica; Úlcera en la pierna - insuficiencia venosa; Venas varicosas - insuficiencia venosa
¿Qué pasa cuando una persona tiene insuficiencia venosa? 
Causas
La VERDADERA Causa de la MALA CIRCULACIÓN (Insuficiencia Venosa)
Hoy hablamos de los errores ocultos que afectan la circulación de tus piernas. Las piernas pesadas, hinchadas o con calambres revelan problemas más profundos que simples molestias pasajeras. La deficiencia de nutrientes esenciales y hábitos modernos debilitan las paredes venosas desde dentro.
Descubriremos cómo fortalecer tus vasos sanguíneos y recuperar esa sensación de piernas ligeras que habías olvidado.
La vitamina C fortalece el colágeno vascular: pimientos rojos, kiwis y brócoli al vapor.
El magnesio relaja las arterias: espinacas salteadas, almendras remojadas y semillas de calabaza. Las harinas refinadas inflaman y endurecen los vasos sanguíneos día tras día.
La bomba muscular de pantorrillas impulsa la sangre: elevaciones de talones cada hora.
La vitamina B3 dilata vasos naturalmente: champiñones shiitake, lentejas y levadura nutricional.
El remojo libera minerales: legumbres 8 horas, cocción al vapor conserva nutrientes.
La vitamina K2 evita calcificación arterial: natto fermentado dirige el calcio correctamente.
Caminar 20 minutos activa óxido nítrico, el vasodilatador más potente del cuerpo. La circulación depende de múltiples factores trabajando en armonía, no solo la genética. Pequeños cambios diarios en nutrición y movimiento pueden transformar la salud vascular. Tus piernas pueden recuperar esa ligereza perdida con las herramientas correctas.
Normalmente, las válvulas de las venas profundas de la pierna mantienen la sangre fluyendo de nuevo hacia el corazón. Cuando se presenta insuficiencia venosa por largo tiempo (crónica), las paredes de las venas se debilitan y las válvulas se dañan. Esto provoca que las venas permanezcan llenas de sangre, especialmente al estar de pie.
Los síntomas incluyen hinchazón, dolor, pesadez, calambres y la aparición de venas varicosas u úlceras en las piernas.
La insuficiencia venosa suele referirse a la hinchazón de las extremidades inferiores, a los cambios tróficos de la piel y a las molestias secundarias a la hipertensión venosa. La insuficiencia venosa crónica es un proceso patológico prevalente.
La discapacidad relacionada con la insuficiencia venosa crónica se atribuye a la disminución de la calidad de vida y a la pérdida de productividad laboral. En la mayoría de los casos, la causa son las válvulas incompetentes.
Cada año se diagnostican aproximadamente ciento cincuenta mil nuevos pacientes con insuficiencia venosa, y el sector médico gasta casi quinientos millones de dólares en la atención de estos pacientes.
Insuficiencia venosa
Las arterias suministran sangre desde el corazón al resto del cuerpo, las venas transportan la sangre que circula de vuelta al corazón y las válvulas de las venas impiden que la sangre vuelva a fluir.
Se habla de insuficiencia venosa cuando las venas tienen problemas para enviar la sangre de las extremidades de vuelta al corazón. En esta afección, la sangre no regresa correctamente al corazón, lo que hace que la sangre se acumule en las venas de las piernas.
Hay varios factores que pueden provocarla, aunque las causas más comunes son los coágulos de sangre, como la trombosis venosa profunda y las varices. Aunque haya antecedentes familiares de insuficiencia venosa, hay medidas fáciles que puede seguir para minimizar las posibilidades de desarrollar la enfermedad.
Los coágulos de sangre o las varices suelen ser las principales causas de la insuficiencia venosa.
En las venas sanas, el flujo de sangre desde las extremidades hasta el corazón es continuo. Las válvulas de las venas de las piernas ayudan a evitar el reflujo de la sangre. Las causas más típicas de la insuficiencia venosa son los casos anteriores de coágulos de sangre y las venas varicosas.
Cuando se presenta una obstrucción del flujo de avance a través de la vena, como en el caso de un coágulo de sangre, la sangre se acumula debajo del coágulo, lo que puede dar lugar a una insuficiencia venosa.
Cuando las válvulas faltan o están dañadas, y la sangre se filtra a través de las válvulas afectadas, se producen las varices. En algunas situaciones, la debilidad de los músculos de las piernas que empujan la sangre hacia delante también puede contribuir a la insuficiencia venosa.
La insuficiencia venosa es más frecuente en las mujeres que en los hombres. También es más probable que se desarrolle en adultos mayores de 50 años.
Algunos otros factores de riesgo son:
- Venas varicosas
- Antecedentes de trombosis venosa profunda en las piernas. Coágulos de sangre
- Embarazo
- Debilidad muscular, lesión en la pierna o traumatismo
- Antecedentes familiares de insuficiencia venosa
- Fumar
- Inflamación de una vena superficial, conocida como flebitis
- Obesidad
- Cáncer
- Estar sentado o de pie durante mucho tiempo sin moverse.
- Edad
- Sexo femenino (relacionado con los niveles de la hormona progesterona)
- Embarazo
- Permanecer sentado o de pie por mucho tiempo
- Estatura alta
¿Cuáles son los síntomas de la insuficiencia venosa?
Síntomas de la insuficiencia venosa
- Edema, hinchazón de las piernas o los tobillos.
- Dolor que empeora al ponerse de pie y mejora al levantar las piernas.
- Molestias en las piernas
- Piernas débiles
- Picazón en las piernas
- Dolor, palpitaciones o pesadez en las piernas
- El grosor de la piel de las piernas o los tobillos
- Úlceras en las piernas
- Venas varicosas
- Sensación de tirantez en las pantorrillas.
- Dolor que mejora al levantar las piernas
Los cambios en la piel de las piernas incluyen:
- Hinchazón de las piernas
- Piel irritada o reseca si la rasca
- Piel enrojecida o hinchada, reseca (dermatitis de estasis)
- Venas varicosas superficiales
- Engrosamiento y endurecimiento de la piel en las piernas y en los tobillos (lipodermatoesclerosis)
- Úlceras o heridas que tardan en sanar en las piernas y en los tobillos.
Diagnóstico de la insuficiencia venosa
Etapas de la insuficiencia venosa
El trastorno venoso es una categorización amplia para muchos problemas de las venas, incluida la insuficiencia venosa. El área médica basa estos estadios en los síntomas clínicos que los médicos pueden observar al examinar las piernas. Las etapas del trastorno venoso incluyen:
- Etapa 0: no hay signos que se puedan ver ni sentir. Puede sentir síntomas como piernas doloridas o cansadas.
- Etapa 1: Vasos sanguíneos visibles, que incluyen las arañas vasculares.
- Fase 2: Venas varicosas de un mínimo de tres milímetros de ancho.
- Etapa 3: Edema, que es la hinchazón, pero no hay alteraciones de la piel.
- Etapa 4: Cambios en el color o la textura de la piel.
- Etapa 5: Úlcera curada.
- Etapa 6: Úlcera aguda, activa.
A partir del estadio 3, el diagnóstico sería de insuficiencia venosa crónica. En otras palabras, tener varices no significa que se tenga una insuficiencia venosa crónica, pero las varices son un signo de problemas de flujo sanguíneo que podrían empeorar con el tiempo. Por lo tanto, es necesario informar a su médico sobre cualquier variz nueva que observe.
Tratamiento de la insuficiencia venosa
Flebectomía ambulatoria
Prevención de la insuficiencia venosa
- No permanezca sentado o de pie en una misma posición durante mucho tiempo.
- En su lugar, levántese y muévase con frecuencia.
- No fume, pero si fuma, déjelo cuanto antes.
- Haga ejercicio con regularidad.
- Mantener un peso corporal saludable.
¿Cómo se combate la insuficiencia venosa?
Para la insuficiencia venosa es bueno elevar las piernas, hacer ejercicio como caminar o nadar, usar medias de compresión, seguir una dieta baja en sal y rica en fibra y antioxidantes, y mantener un peso saludable.
También se recomienda evitar estar de pie por mucho tiempo, no usar ropa ajustada, evitar el calor excesivo y consultar a un profesional de la salud para un plan de tratamiento personalizado.
El tratamiento para la insuficiencia venosa puede ser con medicamentos y en casos más severos puede tratarse por medio de cirugía.
¿Cuál es el mejor ejercicio para la insuficiencia venosa?
Caminar: es uno de los ejercicios más simples y efectivos para mejorar la circulación en las piernas. Ayuda a activar la bomba muscular de la pantorrilla, facilitando el retorno venoso. Intenta caminar al menos 30 minutos al día.
5 EJERCICIOS para MEJORAR la INSUFICIENCIA VENOSA I No MÁS piernas HINCHADAS
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¿Cómo mejorar la circulación en las piernas y prevenir las varices?
Las varices no son solo un problema estético, son señal de que tu sistema circulatorio no funciona correctamente. Los músculos de las pantorrillas actúan como un segundo corazón, bombeando sangre hacia arriba. . El sedentarismo debilita este sistema, causando acumulación de sangre y presión venosa que deteriora las paredes de las venas.
. Elevar las piernas invierte la gravedad a tu favor, permitiendo que la sangre drene naturalmente hacia el corazón sin esfuerzo.
. Reducir el sodio oculto en procesados disminuye la retención de líquidos que aumenta el volumen sanguíneo y presión venosa.
. Caminar activa la bomba muscular de las pantorrillas de forma rítmica, impulsando el retorno venoso de manera constante y efectiva.
. Las medias de compresión aplican presión graduada desde el tobillo hacia arriba, imitando la acción de músculos fuertes y tonificados.
. La hoja de vid roja contiene flavonoides que sellan las paredes venosas, reduciendo fugas de líquido y la hinchazón de tobillos.
. El té verde aporta catequinas que mantienen flexibles las venas, pero debe tomarse sin leche animal que anula su absorción.
. El castaño de indias contiene aescina, un venotónico que fortalece las paredes venosas desde dentro y reduce la permeabilidad vascular.
En definitiva, cuidar tus piernas requiere combinar movimiento constante, control del sodio y apoyo natural. Las varices son conversaciones de tu cuerpo pidiéndote atención. Responde con gestos simples, elecciones conscientes y aliados naturales que fortalecen desde dentro.
FUENTE: Modern Heart & Vascular // Medline Plus //
EDICIÓN: Erika Rojas Portilla





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