El
Mero Guasa es la segunda especie más grande del mundo que pertenece
a la familia Serranidae, y la más grande del Atlántico,
alcanzando hasta una talla de 3 metros, pesar 400 Kg y vivir 37
años.
Esta especie se encuentra amenazada en la categoría “En Peligro Crítico” según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza – UICN y también por el Libro Rojo de Peces Marinos de Colombia. Además, cumple con una importante función ecológica al ser el único depredador del pez león, especie invasora en la cuenca del Caribe.
MORFOLOGÍA
- Forma: Su cuerpo es alargado, aplanado en los laterales y con la mandíbula inferior saliente.
- Talla mínima: 45 cm.
- Color: Es oscuro y oscila entre el verde y el marrón. Su parte inferior es amarillenta. Su aleta dorsal tiene el borde naranja, y las demás, de borde azul claro.
- Longitud y peso: Su tamaño varía entre sus diversas especies, desde los 3 metros del mero australiano hasta los 10 cm de las especies más pequeñas. Pesa entre 2 y 300 kilos.
- Alimentación: El mero se alimenta de cangrejos, sepias y otras presas, sobre las que se abalanza y aplasta con sus poderosas mandíbulas. Se alimenta principalmente de crustáceos, langostas espinosas en particular, así como tortugas, pulpos y peces, incluyendo rayas e incluso tiburones.
Posee un cuerpo ovalado, aplanado
en los laterales, con cabeza y boca muy grandes. Puede llegar a medir
cerca de 3 metros y pesar 300 kilos.
Las
tonalidades de su piel son muy variadas, predominando los colores
verdes, azulados y amarronados, aunque su vientre se torna
amarillento y la aleta dorsal anaranjada.
Presenta 11 espinas dorsales; 15 o 16 radios blandos dorsales; 3 espinas anales; 8 radios blandos anales. La cabeza es alargada. El opérculo tiene 3 espinas.
Las aletas pélvicas son más pequeñas que los pectorales. Las bases de las aletas dorsal y anal están cubiertas de escamas suaves y piel gruesa. Los juveniles son de color leonado con bandas verticales irregulares
En definitiva una especie tan popular que hasta el refranero tradicional lo recoge como uno de los platos más exquisitos: "De la mar el mero y de la tierra el cordero".
REPRODUCCIÓN
Se
reproduce en verano, cuando hasta 100 individuos maduros se congregan
en una zona reducida para desovar
a
entre 15 y 30 m de profundidad. Los ejemplares jóvenes nacen
hembras, pero entre los 10 y los 12 años cambian de sexo,
volviéndose machos.
El
mero es uno de los animales denominados hermafrodita proterogínico,
ya que puede nacer como hembra y, ante la muerte de un gran macho o
la ausencia de ellos, transformar su sexo convirtiéndose en macho al
llegar a la madurez sexual, aunque tan sólo hembras de gran tamaño
siguen este proceso.
Mide
en promedio 175 cm. de longitud;
los
machos
pueden
llegar alcanzar los 250 cm. de longitud total; al alcanzar la madurez
miden unos 128 cm. Pesa más de 300 kg,
habiéndose registrado ejemplares hasta de 455 kg.
HÁBITAT
Esta especie habita en el mar desde zonas someras hasta 100 m de profundidad y esta asociado a arrecifes de coral, manglares, pastos marinos Florida, Bahamas, Golfo de México y el Mar Caribe hasta las costas de Brasil. En el Atlántico oriental se encuentra en las costas de África desde el Congo hasta Senegal.
Las poblaciones naturales del Mero Guasa se han disminuido en forma drástica, no solo en Colombia sino en todo su rango de distribución por ser vulnerables a la sobrepesca y por la destrucción de su habitat.
El
mero habita en aguas tropicales y templadas como las costas de Brasil
y las Bermudas (en el océano Atlántico), en las aguas del mar
Mediterráneo y también en las del Pacífico. Se suele encontrar
junto a algas, corales y otras zonas protegidas de la costa, a unas
profundidades que oscilan entre los 20 y los 200 metros.
Habita en gran variedad de
hábitats, que incluyen arrecifes, manglares, praderas submarinas,
estuarios o aguas más profundas.
Vive
en una zona limitada con un gran número de escondites disponibles.
Algunos de ellos son su viviendas habituales, mientras que otros solo
son refugios momentáneos. Los juveniles se encuentran en zonas de
manglares
y
estuarios salobres;
los adultos de gran tamaño pueden ser encontrados en los estuarios
y
parecen ocupar áreas de distribución limitadas con poco movimiento
entre los arrecifes.
Las especies más conocidas
-
La guasa del Atlántico (Epinephelus itajara) es uno de los miembros más grandes de la familia de la lubina. Su cuerpo es grande y fornido, el ancho generalmente es la mitad de su largo. La cabeza es ancha con pequeños ojos y las aletas pectorales y traseras son redondeadas. Las primeras aletas y las dorsales se unen entre sí a lo largo de la parte posterior y la base de la primera aleta dorsal y la aleta anal están cubiertas de escamas y piel gruesa.
La
guasa del Atlántico es de color verde pálido, gris o amarillo
oscuro a marrón, con pequeñas manchas oscuras en la cabeza, el
cuerpo y las aletas. Los ejemplares más pequeños de menos de un
metro de largo son más llamativos, tienen tres o cuatro barras
verticales tenues en sus lados. Los jóvenes son de color rojizo con
bandas oscuras y manchas. Este pez depredador tiene varias filas de
pequeños dientes en la mandíbula y dientes pequeños en la faringe.
Otros
nombres:
Cherne, Guato, Guaza, Batata Mero, Mero Pintado, Mero Sapo.
Tallas:
Longitud: hasta 2,5 m. Peso: hasta 360 kg.
Biología.
La guasa del Atlántico puede ser solitaria o encontrarse en grupos
de hasta 50 o más individuos. Su área de acción parece limitada y
produce un sonido progresivo cuando se ve amenazado por los buzos o
grandes tiburones.
Las variaciones de estas vocalizaciones también tienen propiedades
de comunicación.
Durante
la época de reproducción que es de julio a septiembre, la guasa del
Atlantico se reúne en los sitios de desove habitual en grupos de 100
individuos o más. Los huevos fertilizados se encuentran dispersos en
la columna de agua y se convierten en larvas con forma de cometa con
largas espinas en la aleta dorsal y en las aletas pélvicas.
Alrededor de un mes después de la eclosión las larvas maduran
convirtiéndose en jóvenes de sólo 2,5 centímetros de largo y se
establecen preferentemente en un hábitat de manglares.
Estos
peces son muy longevos, con una baja tasa de crecimiento y maduración
sexual tardía. Los machos comienzan la reproducción cuando tienen
de cuatro a seis años y las hembras maduran a los seis o siete. A
pesar de esto, la guasa del Atlántico es como la mayoría de los
meros y puede experimentar un cambio sexual a través de su
vida, comenzando como hembra y convirtiéndose luego en macho, aunque
esto nunca se ha observado en esta especie.
Se
alimenta de crustáceos como la langosta, camarones y cangrejos, así
como de peces incluyendo rayas y peces loro, además de los pulpos y
tortugas marinas jóvenes. A pesar de que tiene dientes, devora a su
presa y se la traga completa. Antes de alcanzar el tamaño completo,
la guasa del Atlántico es susceptible al ataque de la barracuda, la
caballa y las morenas, así como varias especies de tiburones. Una
vez que se ha desarrollado completamente, los humanos y los grandes
tiburones son los únicos depredadores de esta especie.
Rango.
La guasa del Atlántico se encuentra en el Océano Atlántico
oriental, desde Senegal hasta el Congo, así como en el Océano
Atlántico occidental, de la Florida a Brasil, incluyendo el Golfo de
México y el Mar Caribe. Al parecer es poco común en torno a las
Islas Canarias. Una población dispersa en el Océano Pacífico
oriental ha sido clasificada como una especie separada: la guasa del
Pacífico (Epinephelus quinquefasciatus).
Hábitat.
Este pez marino habita aguas costeras poco profundas con barro, roca
o fondos de corales y se encuentra con poca frecuencia por debajo de
46 metros. Los jóvenes habitan los manglares y las estructuras
asociadas durante los primeros cuatro a seis años de su vida y luego
pasan a los arrecifes de alta mar cuando alcanzan alrededor de un
metro de longitud. Los adultos prefieren hábitats estructurados
tales como cornisas rocosas, cuevas y restos de naufragios de buques.
Estado.
La guasa del Atlántico está clasificada como En Peligro Crítico
(CR) en la Lista Roja de la UICN.
Amenazas.
La guasa del Atlántico es particularmente propensa a la sobrepesca
debido a su gran tamaño, la lenta tasa de crecimiento, baja tasa de
reproducción y desove en grupo. Este pez tiene una excelente calidad
en la carne y ha estado en riesgo debido a su importancia para la de
pesca recreativa.
Conservación.
Durante la década de 1980 se observó una reducción en los números
dentro de las agregaciones de desove de la especie, pasando de más
de 100 individuos por cada ubicación a menos de 10 y los números se
sospecha que se han reducido en un 80 por ciento. Esto llevó a la
protección legislativa de prevención de la pesca de esta especie.
En los diez años posteriores a la aplicación de la legislación, el
número de ejemplares en cada desove se elevó a entre 20 y 40.
El Mero Guasa es un excelente candidato para el desarrollo de la tecnología de su cultivo por su alta tasa de crecimiento, su adaptabilidad a condiciones de cautiverio, su elevado precio en el
mercado y la exquisitez de su carne que ha motivado el famoso refrán: “de la mar el mero y de la tierra el cordero”. Sin embargo, no existía en el mundo la tecnología para su cultivo. Los avances obtenidos se constituyen en un gran acontecimiento científico y técnico que permiten vislumbrar una estrategia para la conservación de esta especie y la diversificación de la acuicultura a nivel mundial.
En
el mar Mediterráneo (Epinephelus guaza), existen otras especies
distribuidas por mares cálidos y tropicales. Algunas de las más
conocidas son las siguientes.
- Mero australiano (Epinephelus lanceolatus): Es uno de los meros de mayor calibre. Mider hasta 3,5 m.
- Mero de Nassau (Epinephelus striatus): Habita en las zonas tropicales del océano Atlántico. Es uno de los meros más consumidos en los Estados Unidos.
- Mero pinto o cherna americana (Epine-phelus morio): Se encuentra en las costas de Florida y es considerado uno de los meros con mejores cualidades gastronómicas.
- Mero negro (Epinephelus nigritus): Se encuentra en las aguas del Caribe colombiano.
- Mero moteado o cherna cabrilla (Epine-phelus analogus): Se reconoce por su coloración, caracterizada por manchas y barras oscuras sobre un cuerpo de color marrón-rojizo.
- Mero guasa o mero gigante (Epinephelus itajara): Es un pez de gran tamaño que puede alcanzar los 300 kilos de peso.
El Mero Guasa es un excelente candidato para el desarrollo de la tecnología de su cultivo por su alta tasa de crecimiento, su adaptabilidad a condiciones de cautiverio, su elevado precio en el
mercado y la exquisitez de su carne que ha motivado el famoso refrán: “de la mar el mero y de la tierra el cordero”. Sin embargo, no existía en el mundo la tecnología para su cultivo. Los avances obtenidos se constituyen en un gran acontecimiento científico y técnico que permiten vislumbrar una estrategia para la conservación de esta especie y la diversificación de la acuicultura a nivel mundial.
PRIMERA PRODUCCIÓN DE LARVAS DE MERO GUASA (Epinephelus itajara) EN EL MUNDO
Desde
hace mas de 20 años el Centro de Investigación, Educación y
Recreación – CEINER – Oceanario Islas del Rosario realiza una
investigación para lograr la reproducción controlada del Mero
Guasa Epinephelus itajara con el fin de diversificar la acuicultura
en Colombia y como estrategia para la conservación de esta especie
amenazada. El CEINER cuanta con el único plantel de reproductores
en condiciones de cautiverio en el mundo.
CEINER
– Oceanario Islas del Rosario realiza una investigación para
lograr la reproducción controlada del Mero Guasa Epinephelus
itajara .
Como
un acontecimiento histórico, el mes de mayo de 2015 por primera vez
en el mundo se logro con éxito su reproducción a partir de la
selección de ejemplares en el CEINER con la cual se viene
desarrollando su larvicultura.
Este
avance tecnológico se ha logado gracias al apoyo y financiación
del Convenio UAESPNN – CEINER (1997). Además participa La
Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca –AUNAP, la Gobernación
de Bolívar a través del Sistema General de Regalías fondo
Ciencia y Tecnología e INCODER (Convenio INCODER – CEINER 2006).
Este éxito se ha logrado también gracias al trabajo conjunto con
el Centro de Investigaciones de la Acuicultura de Colombia –CENIACUA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
TU COMENTARIO O SUGERENCIA NOS HARÁ CRECER